Elle, de Bridlington (Inglaterra), desafió a los médicos
que le dijeron que le quedaban entre seis y 12 meses de vida si no
encontraban pronto un donante para curar su insuficiencia hepática.
La joven cambió su dieta diaria por una alta en hidratos de carbono y
grandes cantidades de chocolate, lo que, junto a su medicación, ha hecho
que la salud de Elle mejore rápidamente.
La
milagrosa recuperación se ha completado cuando los médicos,
oficialmente, la han sacado de la lista de trasplantes de hígado después
de que su nueva dieta le haya ayudado a controlar su enfermedad.
"Mis amigos no lo puedo creer, comer chocolate y patatas fritas y todo
tipo de comida basura y no tener que preocuparse de las consecuencias",
afirma Elle.
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